Beatriz Calderón Alzate, académica de la Facultad de Negocios y Economía de la universidad, destacó que “no hay basura en la naturaleza, solo residuos que podemos transformar en nuevas formas de materialidad para nuestras obras”.
-Loredana Giustolisi Marcoccia.
En el marco del Mes de la Sostenibilidad, la Escuela de Teatro de la Universidad Finis Terrae presentó la charla «Teatro de Calle y Reciclaje», en la que el profesor Pablo de la Fuente Gálvez abordó la integración del reciclaje en el diseño escénico, mostrando cómo los materiales reutilizados pueden transformarse en elementos clave de la escenografía teatral.
Durante la charla, el profesor De la Fuente explicó tres tipos de reciclaje fundamentales en la creación escénica. El primero, consiste en reciclar materiales nobles, como la madera, para darles una nueva vida simbólica, permitiendo que elementos como una puerta vieja se conviertan en montañas o cóndores sobre el escenario. Este proceso, según De la Fuente, implica una metamorfosis donde el material pierde su identidad original para convertirse en algo completamente nuevo.
El segundo tipo de reciclaje se enfoca en reutilizar materiales desechados sin borrar su historia previa. El profesor destacó la importancia de mantener el «signo de basura», es decir, reconocer que una virgen hecha de botellas plásticas o una falda confeccionada con tapas de bebidas sigue siendo basura, pero transformada en arte. Este enfoque resalta la dualidad de los objetos, que siguen cargando su connotación original mientras adoptan un nuevo significado en el contexto escénico.
Finalmente, el tercer tipo de reciclaje presentado consiste en mezclar diferentes elementos de basura para crear objetos nuevos, pero reconocibles. Aquí, De la Fuente enfatizó que, aunque el público pueda identificar los materiales originales, como una lata de spray o un tubo de PVC, el objetivo es que vean estos desechos como parte de un objeto innovador, como una bazuca o una estructura artística compleja.
“No hay basura en la naturaleza«
La charla concluyó con los comentarios de Beatriz Calderón Alzate, académica de la Facultad de Negocios y Economía de la universidad, quien destacó la relevancia de la sostenibilidad no solo desde una perspectiva ambiental, sino también social y económica. Calderón Alzate resaltó cómo el teatro, trabajando desde la precariedad, puede innovar y aportar al desarrollo local, al tiempo que cuida el impacto ambiental. “El teatro no está ajeno a la sostenibilidad, simplemente ha desarrollado más unas aristas que otras”, señaló.
La profesora también subrayó la importancia de ser conscientes de los impactos generados por nuestras decisiones, tanto a nivel individual como empresarial, y cómo la sostenibilidad es un camino continuo, no un destino final. “No hay basura en la naturaleza, solo residuos que podemos transformar en nuevas formas de materialidad para nuestras obras”, concluyó.
Esta charla dejó claro que el reciclaje no es solo una cuestión técnica, sino también un acto creativo que puede redefinir la relación entre el arte y la sostenibilidad.